En 2020 la irrupción de la pandemia del Covid-19 ha trastocado mucho las tendencias de consumo, especialmente en el sector de la alimentación. En este post vamos a analizar dos estudios que se han realizado recientemente enfocados en el sector de la panadería y la pastelería para comprender mejor cómo ha incidido la crisis sanitaria en los fabricantes y cómo se han adaptado a las nuevas tendencias que han marcado los consumidores.
El primer estudio se llama “Taste Tomorrow” y fue realizado por Puratos a mediados de 2020. Se entrevistó a gourmets de 8 ciudades diferentes (París, Londres, San Francisco, Shanghai, Sao Paolo, Ciudad del Cabo, Tokio y Dubai) para conocer las nuevas tendencias globales y locales en panadería y pastelería y también se preguntaron a 17.000 consumidores de 40 países diferentes sobre sus preferencias, actitudes y percepciones del pan, la bollería, la pastelería y el chocolate.
Los resultados de este estudio nos indican que el consumidor cada vez exige más información sobre los productos que consume basándose en tres criterios: salud, frescura y sabor. Estos factores influyen y seguirán influyendo en los consumidores a la hora de comprar un producto u otro.
Resultados del Estudio “Taste Tomorrow”
El informe dejó claro que la alimentación influye a la hora de preservar la salud en los momentos de crisis, apostando por productos saludables con ingredientes básicos y sabores naturales. Otro dato interesante es que el precio del producto pasó a ser un aspecto secundario, de tal forma que el 60% de los españoles decidió no comprar el producto más barato a pesar de la reducción de ingresos durante los meses de confinamiento.
Por otro lado, el 73% de los encuestados confía en los productos artesanos y el 59% apuesta por los productos de proximidad con la intención de pagar más si es necesario.
Otro aspecto que se ha potenciado mucho en el último año es el servicio a domicilio y la venta online. Después del confinamiento un 61% de los encuestados cree que todos los restaurantes deberían ofrecer el servicio de comida a domicilio y el 29% dicen que seguirán pidiendo la comida online.
Otra tendencia que ha nacido en el último año es el “Home Baking”, es decir, la elaboración en casa de productos de panadería y pastelería. Parece que esta tendencia ha llegado para quedarse porque el 62% de los encuestados desean una mayor oferta de ingredientes para elaborar estos productos.
Resultados del Estudio Innograin
En otro estudio realizado por Innograin, el grupo de investigación sobre cereales, a principios de 2021, se publicaron datos sobre hábitos de consumo del pan muy interesantes. Por ejemplo, sobre los establecimientos preferidos para adquirir el pan, el 62% de los encuestados prefiere comprarlo en las panaderías, un 25% apuesta en los supermercados, un 10% en tiendas de alimentación y un 3% en otros establecimientos. Las personas entre los 36 y 50 años prefieren las panaderías y los más jóvenes prefieren hipermercados o supermercados.
El 85% de los encuestados compra el pan fresco, el 8% compra pan de molde y el 7% pan seco. De las personas que compran pan fresco, el 56% apuesta por los panes con mayor hidratación (rústicos, chapatas) y el 30% por productos de hidratación intermedia y un 11% por los productos de baja hidratación (candeales, fabiolas…). En cuanto a los tamaños, el 75% de los clientes compra pan mediano, el 18% tamaño grande y el 9% tamaño pequeño.
Otro dato importante es que el 38% de los encuestados no adquiere nunca panes con algún tipo de aportación nutricional, como los panes integrales o los elaborados con semillas. Un 47% cree que los panes elaborados de manera artesanal contienen menos aditivos y un 23% creen que respetan el medio ambiente.
Tendencias en panadería y pastelería
Después de repasar los datos de estos estudios, sin duda la salud ha cobrado un especial protagonismo a raíz de la pandemia y ha influido en los consumidores a la hora de elegir sus productos de panadería y pastelería. Las marcas han intentado corresponder a las demandas fabricando productos más saludables pero sin renunciar al sabor, para ello han apostado por introducir nuevos cereales, más fibra y reducir el contenido en grasas, gluten y azúcar.
Otro aspecto que las marcas han tenido muy en cuenta es la vuelta a los productos tradicionales, con la utilización de ingredientes naturales, masa madre y las etiquetas eco y bio. Además, los consumidores exigen más información del producto que van a consumir, con un etiquetado “clean label” donde se especifique el origen y la calidad de los ingredientes utilizados en la fabricación junto a los valores nutricionales. Si a esto le sumamos la sostenibilidad en la fabricación y el cuidado del medio ambiente, sin duda el producto tendrá mayor impacto en el consumidor.
En Lazaya aportamos nuestra experiencia, variedad y calidad de fruta confitada a las grandes marcas de panadería y pastelería para que elaboren sus productos y se adapten a las nuevas tendencias de consumo. Contacta con nosotros para cualquier duda o consulta.