La naranja confitada con chocolate negro es una delas combinaciones más deliciosas de la confitería tradicional. El maridaje que forman la acidez de la naranja con el amargor del chocolate negro (superior al 35% de pasta de cacao en la Unión Europea, pero puede llegar hasta un 80%) hace las delicias de muchas personas en todo el mundo.
Se trata de un producto gourmet con un alto valor añadido, muy apreciado en fechas importantes como la Navidad, pero también en cualquier ocasión especial o incluso para tener en casa cuando nos queremos dar un pequeño capricho gastronómico. Lo cierto es que el invierno (cuando las naranjas están en su punto perfecto de madurez y dulzor en nuestro país), es la época del año en que más apetecen los dulces hechos a base de naranja confitada con chocolate negro.
Una de las preparaciones tradicionales que mezcla de forma deliciosa estos dos ingredientes son los discos de naranja confitada sumergidos en chocolate. Están presentes en el catálogo de las mejores marcas de chocolates, en las bombonerías y chocolaterías tradicionales y también entre las delicias navideñas que encontramos en los supermercados, con segmentos de público diferenciados, pero con una demanda fiel, que gusta de productos tradicionales. El baño de chocolate suele cubrir la mitad del disco, como si se tratara de un dip de chocolate recién extraído de la fondue…
Tiras de cáscara de naranja confitada con chocolate
Otra de las preparaciones que marida naranja y chocolate negro con mucho acierto son las tiras de cáscara de naranja con chocolate que elaboran algunos clientes de Lazaya con nuestras tiras de piel de fruta confitada. Totalmente impregnadas en la cobertura de chocolate o permitiendo que asome, en un hermoso contrastede colores, la piel de la naranja confitada.
¿Has pensado en introducir alguno de estos productos en tu catálogo o entre las especialidades de tu obrador artesano…?
Aunque pueda parecer que el proceso de sumergir la naranja en el chocolate es complicado, nada más lejos de la realidad. El verdadero valor de esta delicatessen está en la selección y tratamiento de los dos ingredientes por separado: el chocolate y la fruta.Del confitado de la fruta sabemos mucho en Lazaya, donde tres generaciones de la misma familia, los Lázaro, llevamos 70 años dedicándonos a la fabricación de frutas en conserva. El proceso de producción industrial es parecido al que se realizaba antaño en las casas, aunque en los últimos años se ha introducido maquinaria para realizarlo. Básicamente, se trata de sumergir la naranja en una solución concentrada de jarabe de glucosa que saca el agua que hay en ella (deshidratación), al tiempo que el azúcar se introduce en las células de la fruta por una diferencia de presión osmótica (impregnación).
Tradición e innovación también emparejan bien
En Lazaya, el proceso de confitado lo hacemos con el máximo respeto hacia la fruta, dando la máxima importancia a la calidad y al control higiénico-sanitario. Se trata de un aspecto que nuestros clientes en todo el mundo valoran enormemente, porque toda nuestra fruta está certificada por los organismos con mayor competencia en esta materia. Además, podemos amoldar nuestra producción a las exigencias de nuestros clientes, preparándola sin azúcar (toda nuestra producción es ya gluten-free), con o sin conservantes, diferentes grados Brix, etc.
Sin duda, el chocolate es el partner ideal para sacar el máximo partido al aroma y el extraordinario sabor de la naranja confitada y las tiras de piel de fruta confitada de Lazaya. Nosotros podemos ayudarte con la fruta confitada, a seleccionar la que más te conviene y a prepararla con el corte deseado para la elaboración concreta en que estés pensando. ¿Tienes alguna duda? Estaremos encantados de resolverla: ponte en contacto con nosotros.