Como todos sabemos, hay muchas clases de cerezas con características muy diferentes que se emplean en repostería y platos salados. Una de las más conocidas son las cerezas al marrasquino y muchas personas se preguntan qué las distingue del resto de cerezas.
En este post vamos a ver cuáles son sus principales cualidades y por qué son tan utilizadas por los profesionales para elaborar sus creaciones en establecimientos Horeca, pastelerías, heladerías o coctelerías.
Historia de las cerezas al marrasquino
Antiguamente, las cerezas al marrasquino fueron un postre de la realeza por su aspecto tan atractivo y su sabor a caramelo, de tal forma que se solían mezclar con pasteles de frutas naturales, aparte de tartas y otros postres.
Su procedencia es italiana, de la región de Padua, y también de Croacia, en la región de Dalmacia. En estas zonas, las cerezas agrias de marasca se maceraban en un licor llamado “Luxardo Maraschino” que se preparaba con el líquido que soltaba la fruta. almendras y azúcar. El resultado era una cereza con sabor dulce, muy aromático y con un toque amargo. Se pueden utilizar diferentes variedades de cerezas para elaborar las cerezas al marrasquino, tanto dulces como amargas, por ejemplo las Rainier o las Royal Ann.
No es hasta la segunda década del siglo XX en EE.UU cuando comenzó a utilizarse la cereza marrasquino como la conocemos actualmente. Ocurrió por la entrada en vigor de la llamada “Ley Seca”, que prohibía la distribución y el consumo de alcohol en todo el país. Las cerezas marrasquino ya no podían macerarse en licor y fue el profesor Ernest H. Wiegand quien ideó un proceso en el que las cerezas se ponían en salmuera, junto a sales de calcio, y después se sumergían en jarabe de azúcar.
Con este nuevo método, se aseguró el suministro de cerezas marrasquino para todas las clases sociales, no solo las más nobles. Se empezaron a utilizar en cócteles muy populares como el “Shirley Temple”, “Manhattan” o la “Piña Colada” y poco a poco se fueron integrando en las coctelerías y pastelerías de todo el mundo.
¿Qué las distingue del resto?
Las principales diferencias de la cereza marrasquino con el resto de cerezas son su aroma, su color rojo brillante y su sabor dulce con toques amargos y reminiscencias a almendras y miel.
Otra característica que hace únicas a estas cerezas son sus distintos colores que se consiguen con colorantes naturales o artificiales. Las más conocidas y utilizadas habitualmente en coctelería son las rojas y las verdes (éstas con sabor a menta), pero también las hay de color azul y amarillo para que los chefs elijan la decoración que mejor encaja con sus postres.
Al tener mayor cantidad de azúcar que las cerezas normales, las cerezas marrasquino se crearon para acompañar a los postres y crear salsas y guarniciones. Su mayor cualidad es la versatilidad, ya que se pueden emplear en decoraciones de postres y cócteles o para añadir un toque de color y elegancia a tartas, bizcochos, pasteles y helados, como por ejemplo el Banana Split.
Además, las cerezas al marrasquino picadas o trituradas también se utilizan para aportar color al glaseado o como ingrediente para elaborar panes, pasteles, bizcochos, galletas, helados, tartas, tartaletas, cupcakes y otros postres.
Por otro lado, la cereza marrasquino tiene cierto parecido a los caramelos masticables, por lo que parece más un dulce que una fruta. Por eso se utiliza sobre todo para endulzar, ya que su sabor no resulta determinante en el producto final.
Al disponer de un alto contenido en azúcar, las cerezas marrasquino pueden durar un largo periodo de tiempo si se conservan los frascos sin abrir en un lugar fresco y oscuro. Una vez abierto el envase, si se mantiene sellado entre uso y uso en el refrigerador, pueden aguantar un año o más. Es muy importante cerrar el envase después de cada uso y manipular las cerezas con utensilios limpios y secos para conservar intactas las propiedades de las cerezas.
Cerezas al marrasquino de calidad
Los profesionales de la repostería y los chefs siempre tienen a mano cerezas al marrasquino para darle un toque único a sus creaciones y, por supuesto, seleccionan cerezas de la máxima calidad posible y con una amplia variedad de formatos y envases. En el caso de Conservas Lazaya, disponemos de cerezas al marrasquino sin alcohol, de colores rojo, azul y amarillo, enteras, en trozos o mitades, con tallo o sin tallo y con un aroma amargo característico que las distingue del resto de cerezas.
También disponemos de cerezas al marrasquino sin azúcar, con colorante natural y distintos calibres y brix para adaptarse a las exigencias de los profesionales. En cuanto a envases, disponemos de frascos de cristal, latas, envases de plástico o bolsas de cartón. De esta manera se facilita su uso en distintos contextos, como pueden ser establecimientos Horeca, pastelerías, coctelerías, heladerías, etc. Ponte en contacto con nosotros y cuéntanos lo que necesitas, estaremos encantados de ayudarte.